Miel, ajo, jengibre, cúrcuma y limón para combatir resfriados, gripes y tos

Llegamos a Playa del Carmen hace pocos años y una de las cosas que no nos deja de sorprender es cuánto nos hemos enfermado desde que estamos aquí. Mi esposo y yo probablemente nos habíamos enfermado cuatro veces contadas en los 12 años que estuvimos viviendo fuera. Y mis hijas nunca tuvieron que ir al doctor por enfermedad en sus primeros dos años de vida antes de venir a Playa. ¡En nuestra mente eso iba a ser todavía mejor estando en Playa! Pensamos: clima cálido, sin inviernos largos, sin espacios cerrados porque no puedes jugar afuera con las niñas...  ¡Pero no! Apenas llegamos, boom, peste bubónica para todos.

Mis hijas empezaron a ir a la escuela recién llegamos y ya me habían advertido que cuando llegara ese momento me preparara para, como lo dice mi prima, una gran gripe de seis meses. ¡Para lo que no me prepararon era para todas las veces que mi esposo y yo nos enfermaríamos también! En retrospectiva, y por lo que me dice la gente que ha estado aquí más tiempo, todo es culpa de la humedad y del aire acondicionado.

Una alternativa natural a los jarabes que te manda el doctor

El punto es que para evitar vivir desayunando medicina tuvimos que buscar alternativas naturales, y en nuestras búsquedas encontramos lo que ahora se conoce en mi casa como €œla bomba.€ La bomba es una mezcla de miel, cúrcuma, jengibre, ajo y limón, y es verdaderamente MILAGROSA. Si sientes que te estás enfermando, que te va a dar gripe, o ya te dio, dale un chance a esta poción mágica. Las porciones de esta receta no son exactas. Si no tienes dos limones pero tienes uno, adelante; si te falta uno de los ingredientes pero tienes lo demás, pues es mejor que nada. Si para pasarlo necesitas el doble de miel, vas. Esta es sólo una guía de lo que (más o menos) le ponemos cuando lo preparamos en casa.

Ingredientes

• 2 o 3 limones (amarillos o verdes), su jugo y ralladura

• ½ taza de miel (orgánica de preferencia)

• 6 dientes de ajo, pelados y picados

• 5 cm de jengibre fresco, pelado y rallado

• 2 cucharaditas de cúrcuma en polvo (si la encuentras fresca usa la misma porción que el jengibre) - agrégale un poquito de pimienta negra

Mezcla todos los ingredientes en un tarro de vidrio y déjalos macerar.

Cómo tomarlo

Toma una cucharada de la mezcla cada hora mientras te sientas mal y después unas cucharaditas al día hasta que te sientas perfecto. Advertencia: prepárate para oler a ajo, es inevitable. Aquí ya nos acostumbramos y, como cuando la toma uno la toman todos, pues más o menos pasa desapercibido. No es tan grato, pero es tan maravillosa que la aguantas.

Hay varias opciones de cómo tomar la mezcla, depende de tus gustos y tu tolerancia por los sabores fuertes. Mi esposo prefiere tomarse una cucharada a lo valiente cada hora, seguida por un vaso de agua para pasar el €œmal€ sabor. También puedes diluir una cucharada en agua y tomarla así, poco a poco,  o preparar un tecito tibio y diluirlo ahí (solamente no uses agua hirviendo porque elimina muchas de las propiedades de la miel).

El secreto de la "bomba" está en dos poderosos componentes que combaten resfriado

La cúrcuma como antiinflamatorios

La cúrcuma no sólo le da el color dorado a esta bebida, pero también contiene componentes antiinflamatorios importantes. Las propiedades antiinflamatorias de la cúrcuma se derivan de los curcuminoides, que es un compuesto químico natural que se encuentra en la planta. Recientemente, los estudios han demostrado que la cúrcuma en realidad puede ser más eficaz que el ibuprofeno para algunas afecciones crónicas como la artritis reumatoide y la osteoartritis. Esto se debe a que no solo alivia la inflamación, sino que también repara el tejido dañado y reduce las señales de dolor enviadas al cerebro al bloquear las enzimas llamadas COX-2.

El uso de este ingrediente en India data de más de cuatro mil años atrás donde llegó a tener un significado religioso. La cúrcuma se ha venido utilizado en la medicina del sur de Asia por mucho tiempo y varios estudios sugieren que ésta reduce la oxidación en la sangre y puede llegar a reducir el crecimiento de células cancerígenas, así como ayudar a prevenir enfermedades cardiovasculares y otras como el Alzheimer. La cúrcuma es difícil de digerir por sí sola, por lo que se recomienda agregar un poco de pimienta negra para incrementar su absorción.

El jengibre como refuerzo al sistema inmune

El jengibre es una especia que forma parte de la familia Zingiberaceae. Ha sido utilizado durante siglos por muchas culturas como remedio natural para diversas dolencias. El jengibre se puede usar para tratar resfriados, gripe y náuseas. Las propiedades medicinales del jengibre se han estudiado ampliamente en las últimas décadas y se han encontrado muchos beneficios que respaldan su uso como potenciador del sistema inmunológico.

En un estudio de 2006, se demostró que el jengibre puede reducir la inflamación y mejorar la circulación cuando se consume junto con el ejercicio. Estos beneficios lo hacen particularmente útil para los atletas que buscan un refuerzo de inmunidad antes o después de las sesiones de entrenamiento o los juegos.

También se ha descubierto que el jengibre tiene propiedades neuroprotectoras, ya que aumenta los niveles de antioxidantes en el cerebro que ayudan a defenderse del daño de los radicales libres provocados por factores como los factores estresantes.

La historia del gengibre y su uso medicinal también data de miles de años atrás, siendo utilizado por los chinos, romanos y asiáticos del sur. Este increíble ingrediente en la leche dorada tiene propiedades que refuerzan tu sistema inmune, ayudan a aliviar problemas digestivos y a recuperarse de un resfriado común más rápido.

* Ten en cuenta que este artículo es sólo una opinión y no una referencia médica. Siempre consulta con tu médico.